Un médico quitado de la pena estaba revisando unos libros de medicina y en eso entra a su consultorio un Atlante, alto, delgado.
El médico le dice:
¿En qué le puedo servir buen hombre?
El Atlante se quita el sombrero y le sale una rana de la cabeza.
El médico dice sorprendido:
Pero amigo, ¿Cómo es esto posible?
La Rana contesta:
Pues, no sé doctor, pero empezó con un barrito en la nalga.
Por:
Abel Macias C - México
rec.:16/jun/1996 pub.:1/ene/2000