Un día, durante los exámenes de fin de curso, comenzaron a distribuirse los cuestionarios entre el grupo. Tras dialogar con su nervioso asistente, el profesor se dirigió a nosotros.
Muchachos, tenemos un problema, uno de ustedes recibió la hoja de respuestas en vez del cuestionario. Luego extrajo su billetera y prosiguió, a quien quiera que la tenga y la devuelva, le daré estos cinco dólares.
Un joven levantó la mano, y el profesor se encaminó hacia él.
¡Espera un momento!, gritó otro alumno, ¡Yo te daré 50!
Por:
Juan Carlos Rivera - España
rec.:19/jul/1997 pub.:1/ene/2000