Chiste #169369
Clasificación: Vendedores
Nota:
3.01 / 571
Iba un señor por la calle cuando de repente se le ocurren comer empanadas. Al caminar un par de cuadras encontró a un joven gritando:
¡Caliente la empaná, caliente la empaná! Entonces el señor preguntó: ¿Cuánto vale una empanada? Mil pesos no más, señor. Deme una, por favor. El señor se va con su compra pero, luego de un rato vuelve enfurecido donde el joven y le dice: ¡Oye idiota, esta empanada está fría! Pero claro que sí, por algo yo gritaba, "¡Caliente la empaná, caliente la empaná!"
Por:
Romina Bobadilla - Valdivia - Chile
rec.:28/jul/2003 pub.:9/oct/2003 Comentarios sobre este chiste |