Chiste #2061
Clasificación: Mujeres
Nota:
2.11 / 825
Una mujer llega donde el pastor de su iglesia, y comienza a contarle de sus terribles dolores de cabeza, por casi una hora, grita, llora, gime y describe, con lujo de detalles, el dolor que está sintiendo en ese instante y lo terrible que es su vida sufriendo tanto.
Súbitamente, exclama, embargada de emoción y transida de fe: ¡Alabado sea el Señor! ¡Pastor! ¡Milagro!, su sola compañía me ha curado, se fue de repente el dolor. No, señora, no se fue, el que lo tiene ahora soy yo.
Por:
Andrea - Chile
rec.:18/dic/2000 pub.:27/dic/2000 Enviado:8/feb/2003 Comentarios sobre este chiste |